El embargo económico y comercial "permanece en vigor, sigue causando graves daños al pueblo cubano y continúa obstaculizando el funcionamiento de la economía y sus relaciones con otros países", afirmó el canciller cubano, Bruno Rodríguez.
Al participar en las sesiones de alto nivel de la Asamblea General, el ministro cubano dijo que desde que EE.UU. y Cuba decidieron reanudar sus relaciones diplomáticas, en diciembre de 2014, "se han registrado algunos avances" en los vínculos.
Destacó los progresos en temas de interés común y la visita a La Habana del presidente estadounidense, Barack Obama, así como "docenas de acuerdos firmados sobre cuestiones que pueden reportar beneficios a ambos países".
El ministro cubano dijo que las medidas ejecutivas impulsadas por Obama, que incluyen una flexibilización en las transacciones bancarias y de divisas, anunciadas en marzo pasado, "aunque positivas, resultan insuficientes".
"Son numerosos los ejemplos recientes de perjuicios causados por el bloqueo en el orden económico, comercial y financiero, tanto a Cuba como a terceros", se quejó el canciller cubano.
Mientras siga el embargo económico, Cuba va a seguir exigiendo su fin en la ONU, agregó Rodríguez, y dijo que el final de esa medida "será imprescindible" para que haya una total normalización en los vínculos entre las dos naciones.
"Reiteramos la disposición del Gobierno cubano a continuar desarrollando un diálogo respetuoso con el Gobierno de Estados Unidos sabiendo que resta un largo camino por recorrer para avanzar hacia la normalización", añadió.